Cómo enseñar a usar la bacinilla al bebé

Para que tu bebé use la pelela o bacinilla, lo más recomendable es entre el segundo y tercer cumpleaños, pero hay que tener en cuenta que, primero, el pequeño controlará el esfínter anal (dejará de hacerse caca) y luego el vesical (dejará de hacerse pis).

Hay padres que se embarcan en este entrenamiento antes de los dos años, algo que jamás debería hacerse. Por desgracia, en la cultura occidental los padres se apresuran mucho con el control de esfínteres; no dan tregua a sus hijos. No obstante, tiene que haber previamente una preparación biológica junto con una maduración neuromuscular y psicológica para que todo llegue a buen término.

Por ejemplo, hay muchos niños que se asustan si ven que su materia fecal se va por el inodoro, porque todavía no se encuentran preparados para comprender que no están perdiendo una parte de su cuerpo, sino tan sólo un desecho. Nuestra sociedad, con su preocupación por la higiene y la limpieza, acelera el proceso. No hay que empezar antes de tiempo, pero tampoco relegar el momento de comenzar más allá de los tres años.

¿Lo deciden los padres o lo decide el niño?

De alguna manera es una decisión conjunta. Lo habitual es que los padres vayan introduciendo las normas desde afuera y den al pequeño las primeras pautas de control: traer al hogar una pelela y proponer al pequeño que la utilice para hacer allí sus necesidades. Aunque será el niño el que decida cuándo va a retener o expulsar sus excrementos en ese nuevo lugar, poco a poco, se llegará  a un acuerdo.

La simple verdad sobre el entrenamiento para ir al baño es que si el niño está listo, sucede muy fácilmente. Si no lo está, a menudo se produce una lucha de poder – y todos sabemos que nadie gana una lucha de poder entre padres e hijos. Las peleas con su hijo/a sobre su cuerpo son peleas que usted nunca ganará.

Por suerte, nunca hay una razón para pelear con su hijo por esto. Pasar de los pañales a ser autosuficiente en el uso del baño es un proceso natural. Los humanos lo han estado haciendo durante mucho tiempo. Todos se quitan los pañales tarde o temprano.

Por lo tanto, no es necesario “entrenar a su hijo para usar el baño”. En lugar de ello, establezca condiciones para que su hijo pueda aprender. Su objetivo es hacerlo lo más fácil y sin esfuerzo posible. Piense en esto como un proceso de aprendizaje que se desarrolla con el tiempo, como todos los demás aprendizajes y maestrías.

A continuación le ofrecemos una guía paso a paso para el aprendizaje del uso del orinal dirigido por el niño.

  • Comience por leer libros sobre el uso del baño con su hijo. Las muñecas de entrenamiento de orinal también pueden ser muy útiles. A la mayoría de los niños les encantan. Y una vez que tenga un orinal, asegúrese de que el osito de peluche de su hijo se siente en él con regularidad.
  • Recuerde que la mayor parte de lo que los niños aprenden es a través de nuestro modelaje. Empieza a hablar de lo que estás haciendo en el baño. Deje que su hijo mire. Los niños se beneficiarán viendo a otros niños o a su padre usar el baño.
  • A los niños les encanta copiar a otros niños. Los primos un poco mayores o los amigos que están dispuestos a usar el baño delante de su niño pequeño pueden ser muy valiosos en el modelaje. Para los niños, usted puede hacer un juego de esto poniendo un pequeño ojo de buey en el inodoro para que ellos apunten.
  • Yo recomiendo tener una bacinilla en cada baño de la casa. De esta manera, los niños pueden practicar el sentarse cuando quieran, incluyendo mientras te hacen compañía en el baño.